Me gustaría dedicar este artículo a explicarle algunas cuestiones relativas a la influencia de la madre en las primeras etapas del desarrollo del bebé. La finalidad no es ofrecer ninguna pauta educativa sino intentar mostrar, desde una perspectiva psicológica, temas cotidianos normalmente presentes en la crianza de los hijos.
Empezaré por el bebé. Debido a las características propias de nuestra especie, el «cachorro humano» llega al mundo en tal estado de desamparo e indefensión, que queda absolutamente dependiente de los adultos para la obtención de los objetos que satisfacen sus necesidades.
¿Qué papel juega aquí la madre? ¿Qué es una madre?
Llamaré madre a la persona que se encarga de cumplir una función: la función materna, que principalmente consiste en nutrir al bebé.
Si se fija, esta distinción entre función y persona es la que nos permite entender que haya familias en las que la función materna está desempeñada satisfactoriamente por otros miembros, en ausencia de la madre biológica, así como que existan madres físicamente presentes que no ejercen suficientemente dicha función.
También iré aclarando a qué me refiero con nutrir: por supuesto, a algo más complejo y extenso que al mero hecho de proporcionar alimento.
¿Ha oído hablar de las investigaciones que realizó René Spitz con niños de un orfanato? En ellas observó que, aún teniendo sus necesidades básicas oportunamente cubiertas por los profesionales del centro, los recién nacidos privados del afecto materno sufrían una detención en su desarrollo evolutivo e, incluso, tenían una tasa de mortalidad más alta que los niños no internados.
Esto es sumamente importante porque demuestra que el bebé no es simplemente un cuerpo con necesidades fisiológicas.
Paralelamente, una madre alimenta, pero no sólo con su leche.
Para que la nutrición supere lo puramente biológico, es imprescindible que el bebé haya ocupado un lugar importante en el deseo de su madre, sólo así la madre le podrá dar ese «otro alimento» necesario para su desarrollo.
Como usted sabe, cuando el bebé está siendo amamantado (sea con pecho o biberón), además de la leche, recibe de la madre muchos otros estímulos: siente su tacto, escucha su voz, huele su piel, comparte la mirada con ella…
Por todas estas vías, la madre le entrega su amor al lactante, un amor que insufla vida. Si no recibiera este amor en los primeros meses de vida, al niño le resultaría prácticamente imposible amarse a sí mismo en etapas posteriores.
También, cuando el niño llora, la madre tiene una oportunidad para «nutrirlo» porque, por muy insignificantes que parezcan a los ojos del adulto los motivos del llanto, la angustia sentida puede ser desbordante para el bebé.
Por eso, es vital la capacidad de la madre para tomar el llanto como una petición de ayuda. De esta forma, logra contener su angustia y devolvérsela elaborada.
¿Cómo lo hace? La madre transforma el llanto -del niño sin palabras- en un mensaje concreto que expresa una necesidad: «mi niño está llorando porque tiene hambre», «mi niña llora porque tiene sueño, anoche no durmió bien».
Con estas interpretaciones del llanto –aunque no siempre sean acertadas-, la madre va introduciendo progresivamente a su hijo en el mundo del lenguaje, lo que le posibilitará la adquisición de recursos con los que representarse simbólicamente objetos ausentes en ese momento.
Este logro es fundamental para entrar en el universo humano de la socialización.
Así, con sus intervenciones, la madre le ayuda a diferenciar sus sensaciones internas de la realidad exterior, a saber esperar cuando surja una necesidad, a tolerar las frustraciones y, en definitiva, a regular los impulsos para poder vivir en armonía con el medio circundante.
En este mismo sentido, cuando una madre está dispuesta a que su hijo crezca como un ser diferenciado, le facilitará el contacto con otras personas, mostrándole así que el mundo se extiende más allá de ella. Este gesto de apertura, por parte de la madre, será crucial para el desarrollo futuro de su hijo.
Termino con una pregunta: ¿realmente tendrá la misma influencia en la evolución del bebé una función materna ejercida por la madre biológica que por cualquier otra persona?
*Otros aspectos de la función materna que no he tratado aquí los desarrollaré en futuros posts.